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lunes, junio 16, 2014

DENIRO SALA SIROCO 31 - MAYO - 2014 FABRICANDO SUEÑOS



FABRICANDO SUEÑOS

   Querer es poder. Una frase que vendría como anillo al dedo a los componentes de Deniro, porque desde que comenzaron su andadura, han demostrado, con pasos firmes, que todo cuanto se proponen, pese a los obstáculos que encuentran en su camino, lo consiguen. Dos discos en el mercado y uno nuevo a la vuelta del verano son la mejor prueba de nuestras palabras. Y el pasado 31 de mayo volvieron a dar otro paso más persiguiendo sus sueños.
   Siroco se vistió de gala para la ocasión, una ocasión importante para Deniro, ya que presentaban a su nuevo vocalista, Dave Gómez, y podemos asegurar que superó la prueba con nota. Plenamente integrado en la filosofía de la banda, con grandes momentos de complicidad, Dave consiguió impregnar la actuación de una intensidad difícil de describir. Y eso que la tarea era arriesgada, porque Deniro se “atrevió” a presentar en directo todos los temas que formaran parte de su nuevo trabajo “El sueño que arde”, sin que casi nadie los hubiéramos escuchado todavía. Y sinceramente los temas nuevos encajan como un guante con los más antiguos. Clásicos de la banda como "Secta“, “Arde”, “Una pregunta indiscreta”, “Eres única” o “Soy música” se acoplan a la perfección con “Cruce de caminos”, “Entre tú y yo”, “Esta no es tu piel”, “El luchador” o la que da título al disco. Son auténticos trallazos que en directo, como pudimos comprobar, se convierten en verdaderos diamantes pulidos a la perfección. Además el sonido de la sala, fantástico, y el calor del numeroso público asistente, que coreaba los temas sin parar, acompañaron magistralmente una noche y un concierto inolvidable.
   














Hablar del resto de la formación es hablar de la enorme compenetración de todos y cada uno de ellos, desde la gran sincronía de las guitarras de Nano y Alberto, la sobriedad pero eficaz aportación de Oscar con la batería hasta la habilidad de Frank Ivan con su bajo de cinco cuerdas y, para esa noche sus maravillosas “gafas”, tal vez para verlo todo mejor. Se nota que ahí hay muchas, muchas horas de ensayo. Y eso al final se agradece, porque un concierto de rock debe ser un espectáculo difícil de olvidar, y los conciertos de Deniro son verdaderos espectáculos que permanecen durante mucho tiempo en tus retinas y en tus oídos.

   Deniro comenzaron su personal camino persiguiendo un sueño y ahora, con el paso del tiempo, fabrican sueños en forma de canciones. Canciones que consiguen transportarnos y hacernos soñar durante cada una de sus actuaciones.





















Gracias Deniro por seguir fabricando sueños.