El pasado viernes día 15 acudimos a la
presentación del segundo trabajo de Deniro, “De héroes y gobernantes”. La cita
tuvo lugar en la Sala Copérnico a la que llegamos con unas ganas enormes de
poder presenciar en directo las nuevas canciones de la formación. Y podemos
afirmar sin ningún género de dudas que Deniro han vuelto a conseguirlo, han
superado con creces todas las expectativas que teníamos con ellos. El resultado
del pasado viernes fue de sobresaliente, probablemente una de las mejores
actuaciones que hayamos podido ver de la formación, y eso que ya los hemos
visto unas cuantas veces.
El show comenzó un poco antes de las diez y
media de la noche y a lo largo de una hora y media fueron cayendo prácticamente
todos los temas que forman parte de los dos discos de la banda, si no nos
equivocamos sólo se quedaron fuera dos temas de “El extraño disfrazado de
normal”, su primer trabajo, precisamente el que da título al disco y “Camina”.
Además por si fuera poco nos regalaron la gran versión de Pappo, “No obstante
lo cual”.
Como suele ser habitual en sus conciertos
comenzaron con la instrumental “Nueva queen” y a lo largo de la actuación
fueron alternando los temas de sus dos entregas casi sin descanso, lo cual
sirvió para que el público presente disfrutáramos de lo lindo, coreando y
bailando sus canciones. Por cierto, cabe destacar la gran afluencia de público,
con un considerable lleno de la sala, lo cual nos alegra enormemente en estos
tiempos en que parece que nos cuesta acudir a los conciertos que nuestras
formaciones nos ofrecen con asiduidad en las salas madrileñas. Afortunadamente
Deniro cuenta con un nutrido número de seguidores que no quisieron perderse la
puesta de largo de su nuevo trabajo, y eso le dió todavía más calor a una
actuación que por si sola ya brilló gracias al buen hacer de Deniro, y es que
hay que reconocer que la banda cada día suena mejor, más compacta, con una
fuerza que te traspasa, logrando que nos sintamos identificados con las
historias que cuentan sus canciones. Cada componente de la formación realiza su
trabajo a la perfección: Alberto con su guitarra, sobrio pero efectivo a la
hora de ejecutar los solos y los intensos riffs marca de la casa, siempre
acompañado por Nano, a la otra guitarra, que con su intensidad y su puesta en
escena consigue acaparar todas las miradas, junto a ellos, la contundente base
de Oscar a la batería y Frank al bajo, marcando como un metrónomo el ritmo de
cada uno de los temas, y brillando y llenando el escenario con su presencia
William, y esa voz cautivadora que te lleva y te transporta al particular
universo Deniro. Por que podemos asegurar que la banda lo ha logrado, ha
conseguido crear su propio estilo, recuperando todos los sonidos que les
gustan, pero llevándolos a su terreno, un terreno en el que se mueven como
peces en el agua. Si a eso añadimos que el sonido de la sala acompaño de la
forma adecuada, el resultado no podía ser mejor.
En definitiva, una gran noche de rock and
roll, con una formación que nos proporcionó momentos intensos y fascinantes,
por que como bien dicen ellos mismos, Deniro trabaja por y para los sueños, y
esa noche, con total seguridad, lo consiguieron.